Kate Winslet está en la portada de Variety y comentó sobre su más reciente proyecto en televisión, The Regime, para el cual se preparó exhaustivamente. “Toda la tarea y la preparación son solo para que pueda tomarme un respiro”, dijo. "Significa que siempre tendré el trampolín resistente para regresar y rebotar, y que no se romperá ni cederá, y no voy a mostrarle al universo mi ropa interior". Pero Elena, su personaje, no es el único que resonó con el público, ya que Mare of Easttown fue un éxito en 2021. "Uno solamente quería acurrucarse en el sillón con ella, mirar televisión y comer bolas de queso", afirmó la artista. "Probablemente fue muy agradable para el público ver a una actriz típicamente conocida por ser la protagonista de una película perderse por completo. Interpretarla fue así: me sentí renovada y rejuvenecida por lo repugnante que era todos los días. Y ella era cálida y divertida, y su capacidad para ver a todos era jodidamente hermosa".
Kate ve a su carrera como una serie de momentos esenciales. Primero está Titanic por "razones obvias", después sigue Little Children en 2006 dirigida por Todd Field, quien solicitó su participación creativa en el proyecto. "Me hizo sentir que podía contribuir de una forma más educada y madura sobre el mundo de la película". Luego continúa por The Reader, película que le valió su Oscar en 2008: "Fue la primera vez que trabajé con un director con el que pude estar abiertamente nerviosa y vulnerable" y por Carnage de 2011, en donde trabajó con una de sus actrices favoritas, Jodie Foster.
Kate afirma que después del éxito de Titanic, le costó sentirse cómoda en su propia piel, ya que las críticas a su cuerpo eran constantes. Aún así, le agrada que las mujeres de hoy puedan tener un poco más de libertad para sí mismas. “Realmente estaba sonriendo, porque en cada imagen de las mujeres en la alfombra roja, cada mujer comparte su cuerpo de la manera que quiere, en sus términos. Y sabiendo que pueden hacerlo de forma segura, porque los medios no los van a criticar. Y eso es completamente diferente de cómo solía ser en 1998, 1999, 2000, 2001, 2002”, dijo en referencia al Met Gala de este año. Su voz aumenta en intensidad cada año que enumera: todos los años inmediatamente después de “Titanic”, todos los años en que su cuerpo fue un tema de tendencia. "Esa mierda continuó durante años".
En esos años, Kate decidió bajar la intensidad que le otorgó Titanic y elegir películas de bajo perfil. "Sentí: 'Kate, todo va a estar bien. Tienes que elegir con cuidado'. Instintivamente sentí que elegir cosas más grandes no iba a ser algo bueno para mi salud mental", explicó la actriz, quien protagonizó Hideous Kinky en esos años. Luego, más adelante siguieron proyectos como Holy Smoke y Eternal Sunshine of the Spotless Mind. En 2015, Kate luchó por obtener un papel secundario en Steve Jobs: “Simplemente pensé, a la mierda”, recuerdó Winslet, “y dije: 'Mira'. Deberías pedirme que interprete este papel. Porque seré la única persona de la que no tendrás que preocuparte. Sé exactamente qué hacer. Simplemente me presentaré y haré la cosa'”.
Recientemente, Kate contó que se encontró con una joven actriz. Esta joven “está a punto de interpretar un personaje que es una persona real, que realmente existe hasta el día de hoy. Y ella está en la parte de preparación. Y sé exactamente cómo se siente en este momento: se siente enferma todos los días, está llena de dudas, se mira en el espejo y piensa: "Estoy equivocada". Está todo mal.'" Winslet tranquilizó a la actriz. "Todo lo que sientes es absolutamente bien", recuerda haber dicho. “Sigue haciendo todo lo que estás haciendo. Y cuando llegues al primer día, simplemente lánzate y ensúciate”.
Otra joven actriz que apoya es su propia hija, Mia, con quien actuó en I Am Ruth. “Gracias a Dios, estas terribles críticas que podrían ser activamente dañinas han cesado”, dijo Kate sobre su preocupación sobre la carrera que escogió su niña. “Si esa parte ya no existe, ella misma podrá resolver el resto. Es tan fuerte emocionalmente y fiel a sí misma que no me preocupo”.
Uno de los grandes deseos de Kate es volver al teatro. “La última vez que subí al escenario”, contó, “tenía 18 años, en una producción de 'What the Butler Saw' en Manchester. Y todas las noches estaba jodidamente aterrorizado. Pero me encantó”. Podría, tal vez, estar lista para pisar las tablas una vez más. Pero ella sabe que la presión aumentaría. “Ahora que lo he dejado por tanto tiempo”, agregó, “¡será mejor que sea muy buena en lo que sea! ¡No puedo salirme con la mía!".
Otro papel importante que asumió recientemente fue el de productora. "El papel de un productor puede adoptar muchas formas", dice Winslet. “En 'Lee', lo que hice fue guiarlo montaña arriba, a veces sin ayuda de nadie. Fue como tener otro bebé”. Contrató a miembros del equipo y jefes de departamento de películas anteriores: un diseñador de peluquería y maquillaje de “The Reader” y un diseñador de vestuario de “Quills”. Winslet estaba revisando los momentos de su carrera nuevamente para descubrir, como actriz y como líder, qué la trajo aquí y quién era ahora.
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